Vamos con la receta:
- 150 gr de fresas
- 280 gr de harina
- 1 sobre de levadura en polvo
- Una pizca de sal
- 115 gr de azúcar
- 2 huevos (yo usé "L")
- 250 ml de nata líquida (usé de la de montar)
- 6 cucharadas de aceite de girasol (o 85 gr de mantequilla en pomada)
- 1 cucharadita de extracto o esencia de vainilla
** Para la buttercream:
- 250 gr de mantequilla sin sal a temperatura ambiente
- 290 gr de azúcar glass
- 1 o 2 cucharadas de mermelada de fresa
Preparación:
Lo primero es precalentar el horno a 200º C.
Picamos las fresas, ya limpias, y las reservamos.
En un bol grande, colocamos la harina, tamizada con la levadura y la sal, añadimos el azúcar y las fresas picadas.
En otro bol, batimos los huevos, ligeramente, e incorporamos la nata, el aceite y la esencia de vainilla. Volvemos a batir un poco.
Hacemos un hueco en el centro de la mezcla de harina y fresas y echamos la mezcla de huevos y nata. Mezclamos todo pero sin trabajar mucho la masa.
Repartimos la mezcla en los moldes y, inmediatamente, horneamos unos 20 minutos (hasta que hayan subido y estén bien doraditos).
Sacamos del horno y dejamos reposar 5 minutos antes de pasarlos a una rejilla para que se enfríen.
Aquí, antes de cubrir con la buttercream:
Una vez fríos, los adornamos con la buttercream, con una cuchara o una manga pastelera.
La buttercrean la haremos poniendo en un bol la mantequilla y batiéndola hasta conseguir una crema y, sin dejar de batir, iremos añadiendo el azúcar glass, previamente tamizado, a cucharadas, hasta terminarlo.
Por último, pondremos 1 o 2 cucharadas de mermelada de fresa y mezclaremos con la ayuda de una espátula. Ya está lista para utilizar.
El corte:
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